Ivan y Clementina:
Los amiguitos de El Prado
 
 

Hay un árbol donde vive un hada llamada Clementina, ese árbol está en un prado en el medio del bosque.  Ella es muy amiga de todas las criaturas que viven allí, aunque sus mejores amigos son Pin y Pan.  En un castillo muy grande montado en una montaña muy alta, a un lado del prado, vive un ogro llamado Iván Ojos de Hielo.

Sucedió que un día Iván se metió con sus pies muy grandes corriendo en el prado, porque iba caminando y lo picó una avispa en un ojo, fue tan grande el ardor y picor que sintió Iván Ojos de Hielo en su ojo azul , que se puso a dar brincos por  el camino y a gritar; se sentó en el suelo ya cansado a dar golpes con el puño, con la mala suerte que tumbó la cerca de un jardín, la cerca tumbó un  árbol que estaba pegado a una casa y el árbol hundió el techo de la salita y partió la mesa del comedor con la vajilla de porcelana de los duendecitos amigos del hada Clementina, llamados Pin y Pan...

Pin y pan venían por el camino...Pin venía tocando su laúd y Pan movía su falda rosa , venían  con ganas de descansar , luego de regar la siembra de flores que tenían al lado del río...se pusieron a llorar al ver aquel desastre, pero lo peor es que el Ogro Iván Ojos de Hielo no paraba de gritar y llorar por el dolor..,Los duendes fueron corriendo al árbol donde vivía Clementina y comenzaron a llamarla, ella salió volando con sus alas  rosa y  su vestido de gasa lila, a ver qué había pasado!!

Cuando Pin y Pan llorando le contaron su problema, ella fue volando y habló con Iván...le preguntó dulcemente qué le había pasado y fue volando por todo el prado hasta que consiguió la flor Curatodito: hizo una mezcla , que puso en el ojo del ogro y se curó de inmediato!!!

El ogro Iván agradecido porque se curó su ojito azul, la puso en la palma de su mano y le pidió al hadita que fuera su mejor amiga...Clementina le dijo que aceptaba sí él se hacía amigo de Pin , Pan y todas las criaturas del bosque....  Iván  aceptó encantado y como ahora eran todos amigos se pusieron a acomodar la casita.

Clementina cosió con un hilo de porcelana toda la vajillita de los duendes.  El ogro levantó las ramas, arregló la cerca y puso las tejas del techo en su lugar.  Mientras tanto los duendes tocaron a la puerta de la Elfa Aniuska y le pidieron permiso para hacer galletas y té de miel....luego se sentaron todos a merendar y desde ese días fueron todas las criaturas del bosque excelentes amigos!!!

 

Y colorín colorado...

Este cuento se ha acabado...

Y el que no se pare....

SE QUEDA PEGADO!!!!!